Venía blanca la tarde entre peñas de plata. De encaje y seda mi saya parda. Gemía el viento, suspiraba, besos al aire. Y es que venía, madre, venía blanca la tarde.
posted by Concha Pelayo/ AICA (de la Asociación Internacional de Críticos de Arte) at 2:00 AM
Con tu permiso me lo guardo es de una sensillez exquisita, me agrada enormemente, la naturaleza hace mella y cuando llega la tarde, caigo en la nostálgia.
8 Comments:
Con tu permiso me lo guardo es de una sensillez exquisita, me agrada enormemente, la naturaleza hace mella y cuando llega la tarde, caigo en la nostálgia.
Más besos.
lindo...
/lembras tanto garcia lorca...
o ritmo terno e cálido das tuas palavras...
:) besO
branca e solar
assim me chegas
nas pálpebras da noite
como uma lua de prata
constelada em céu de oiro.
Tão belo, o teu poema, amiga!
Bj.
Es de una belleza blanca, cegadora en su sencillez. Exquisito.
Tiene también un sabor de literatura clásica. Me suena gongorino esto:
"De encaje
y seda
mi saya parda."
Muy hermoso.
Blanco que deslumbra
Naturaleza que sonríe
alfombra de rosas
y jardines del Eden.
Preciosa sencillez
Bss
Tan envolvente venía esa tarde que me cautivó con su pureza, como lo hacen tus poemas, Concha.
Un beso.
Um precioso e belíssimo poema pleno de sensibilidade.
Lorquiano, diria, na perfeição do belo.
Beijo e uma noite tranquila, gentil Amiga.
Oye, qué bonito y qué sencillo. Me ha encantado.
Un beso desde Chile.
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